jueves, 2 de octubre de 2025

Octubre: memoria, resistencia y justicia para África

 Acabamos de entrar en el mes de octubre, que por quinto año consecutivo, el movimiento Black Alliance for Peace ha declarado “mes de Acción contra el AFRICOM”. Recomiendo a todo el mundo conectarse a sus webinars y prestar atención a sus comunicaciones.

 

El 1 de octubre también es un aniversario sangrante para los pueblos de la región de los grandes lagos africanos. El 1 de octubre de 1990, el FPR (Entonces llamado APR, compuesto por un grupo de militares del ejército ugandés) llevó a cabo el primer ataque contra Ruanda, iniciando una guerra de 4 años de masacres indescriptibles hasta culminar en abril de 1994, cuando derribaron el avión presidencial desencadenante de un caos sangriento, que todos conocemos como el genocidio de Ruanda. Mientras los hutus cometían el genocidio contra los tutsis, el FPR cometía al mismo tiempo genocidio contra los hutus y además sacrificó a miles de tutsis para achacar sus asesinatos a los extremistas hutu y por no dejar que el salvar a algún tutsi, les distrajera de su primera tarea que era exterminar a cuantos hutu pudieran; desde esos años hasta hoy mismo, mientras usted lee esto, comete genocidio de las poblaciones congoleñas de las provincias Kivu Norte y Kivu Sur. La llegada al poder en Uganda y Ruanda de los hombres fuertes de las potencias anglosajonas fue una descomunal desgracia para toda África, cuya amplitud se vislumbra mejor con el tiempo.

También fue el 1 de octubre, pero de 2010, cuando honestas manos pequeñas e invisibles de la ONU lograron sacar a la luz EL INFORME, así con mayúsculas, el informe más importante hasta la fecha para la región, que documenta 617 crímenes cometidos en Congo RD, entre 1993 y 2003. Este informe sí presenta las pruebas necesarias para que, llegado el caso de sentar a los responsables del actual gobierno de Ruanda ante un tribunal competente, constituirían crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y actos de genocidio. 

Ayer, Kambale Musavuli  publicó en sus redes sociales un emotivo homenaje a ese día. Lo traduzco íntegro aquí, porque no podría resumirlo: 

 

«En octubre de 2010, cientos de congoleños de todo el mundo, especialmente de Estados Unidos y Canadá, se reunieron frente a la sede de las Naciones Unidas, esperando la publicación del tan esperado Informe Mapping de la ONU el 1 de octubre.
Nuestros aliados estaban con nosotros. V (antes Eve Ensler) estuvo allí bajo la fría lluvia con su equipo de V-Day, esperando con nosotros la publicación del informe. Pocos medios estaban presentes, en su mayoría medios congoleños como Bakolo State de Garry Iwele, que documentaron nuestra lucha.
Muchos aún no comprenden el peso de aquel día. Estados Unidos y Ruanda lucharon ferozmente para bloquear la publicación del informe. ¿Por qué? Porque decía lo que querían enterrar: que Ruanda cometió genocidio en el Congo. Dentro y fuera de la ONU, muchos batallaron para asegurarse de que el informe viera la luz del día. Documentaba 617 graves violaciones de derechos humanos y del derecho internacional humanitario, lo que en el informe se calificaba como crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y actos que podrían constituir genocidio si un tribunal competente lo probara. La palabra posible se insertó únicamente para apaciguar a Ruanda, que había amenazado con retirar sus tropas de las misiones de paz de la ONU si se mantenía el término genocidio.
Aquella mañana nos reunimos temprano. Había una sensación inquietante de que la ONU podría echarse atrás. Así que organizamos una sentada, esperando. Pasaron las horas. Garry Iwele, con su acreditación de prensa, entraba y salía repetidamente. Cuando finalmente salió, sosteniendo el informe de 500 páginas, lo abrió y comenzó a leer en voz alta el resumen ejecutivo. La multitud estalló… vítores, lágrimas y cánticos rompieron la incertidumbre. Recuerdo a Maman Jeanne Kasongo llorando, la firmeza del abogado Joseph Mbangu y a tantos otros cuyos nombres merecen ser recordados.
Pienso a menudo en Frank LeFever, un aliado incansable que aquel día estuvo al borde de la carretera sosteniendo imágenes de las víctimas congoleñas de las fuerzas ruandesas. Cuando le pedí que se uniera a nosotros, me respondió: “Necesito estar aquí para que los transeúntes sepan por qué estamos aquí”. Aún lo echo de menos profundamente.
Quince años después, el tribunal internacional que la sociedad civil congoleña ha exigido durante tanto tiempo sigue sin realizarse. Sin rendición de cuentas para los perpetradores, el Congo continúa sufriendo agresiones repetidas de rebeldes respaldados por Ruanda. Los mismos comandantes nombrados en ese informe —desde el general ruandés James Kabarebe hasta Laurent Nkunda y Sultani Makenga— siguen orquestando atrocidades: violando mujeres, asesinando civiles, enterrando personas vivas en Bunagana, Kishishe, Bambo y más allá.
Hoy, mientras se firman declaraciones en Washington y se escenifican negociaciones en Doha, no debemos distraernos. La demanda de justicia es más urgente que nunca.
Los hijos e hijas de Lumumba no abandonarán esta lucha… para liberar al Congo del yugo de las élites locales, de las potencias vecinas como Ruanda y Uganda, de las corporaciones multinacionales y de la maquinaria del capitalismo global hambrienta de los minerales del Congo para alimentar la llamada Cuarta Revolución Industrial. El tiempo de la justicia es ahora.
En nombre de mi abuelo, que murió el 16 de septiembre de 2019 tras una huelga de hambre de dos semanas denunciando los crímenes de las redes mafiosas que desplazan y matan a nuestro pueblo en Kivu del Norte —ya sea el ADF o el M23—, especialmente alrededor del Lago Alberto, donde se ha descubierto petróleo… como hijo del pueblo nande, ligado a nuestra tierra y portador de la veneración de nuestros ancestros por ella, declaro una vez más…
¡NUNCA RENUNCIAREMOS A NUESTRA TIERRA!»

Ya han pasado 15 años de este emotivo momento, querido Kambale, me has llegado al corazón con esta vivencia tan similar al pueblo palestino y la importancia de la TIERRA. 

Qué duro es ver que Kagame sigue matando a tu gente, las potencias anglosajonas siguen teniendo el poder de protegerlo, los medios y expertos de pacotilla siguen haciendo que todo esto sea invisible o incomprensible, que es lo mismo. Se me caen los brazos al rememorar algunas cosas que veo en los medios…

Medios y comunicadores que se llaman expertos en Africa y dan más importancia al frívolo informe Duclert de 2021 que no demuestra nada, y solo afianza la historia falsaria oficial en casi mil soporíferas y vacías páginas. Ese informe con el que el niño mimado de los Rothschild acometió por fin el advenimiento de poner a su servicio a los mercenarios más brutales de África, los militares ruandeses, que bajo la guisa de “misiones de paz”, protegen los intereses de grandes multinacionales y bancos, en Mozambique, Somalia, Sudán… Expertos que, por otro lado, no conocen el Informe Mapping, o no le conceden la misma importancia que al Duclert. ¿¡Por qué!? Supongo que es porque como decía Churchill, “una mentira recorre el mundo antes de que la verdad se haya podido poner los pantalones”. La verdad, con todas sus pruebas, aburre, mientras que la mentira, da ya masticado su supuesto contenido y además lo recubre de chocolate. 

Estamos tan domesticados por la propaganda implacable, ¡el público y los propios periodistas!, que preferimos las mentiras a las verdades. Las primeras están mejor elaboradas. Sobre todo en Europa, aquí la mentira nos reconforta, como dice Juan Carrero, «apuntala el paradigma imperial hollywoodiense de “Nosotros somos los buenos”».

Hablando de Juan Carrero, tan importante en esta lucha, adorado en la región africana. Comparto una foto de unos días antes del que rememora hoy Ksambale Musavuli. Los días 19 y 20 de septiembre de 2010, estos dos ilustres defensores de la verdad, la paz y la dignidad de los pueblos se sumaron a las concentraciones frente a la ONU, en Nueva York, junto a los africanos, para pedir que no se ocultase ni cambiase el informe Maping. Pere Sampol, hoy fallecido, y el propio Juan Carrero. 

 
 
 
Rosa Moro 


 

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